Comentario sobre el video “Cayó Cavallo”
Alexander Medvedkin, en sus viajes por el Transiberiano, experimentó una nueva forma de hacer cine. En ella, el sustento de la “trama” estaba en el testimonio. El propósito era entender los problemas que los ciudadanos le comunicaban a la autoridad. Esta simultaneidad de miradas nos da lo que el cine llama "punto de vista", lo cual, al verse todo montado, nos ofrece una imagen más completa de un hecho.
Esto me lleva a pensar en cómo tanto Medvedkin como los medios de comunicación en el año 2001 no sabían que, años después, la gente vería sus documentales o los conjuntos de videos montados para aprender la historia de ese momento. El material de archivo utilizado en el video “Cayó Cavallo”, sin embargo, no tiene una conexión narrativa por sí solo. Me refiero a que, cuando los medios iban a las marchas, saqueos o edificios del gobierno, lo hacían por sus propios intereses: informar o exigir.
Pero al unir todo ese material, se crea un documental que informa al espectador sobre el caos de la época. Si bien cada archivo tiene su posición ideológica, montarlos todos en un solo video rompe con esa lógica partidaria y va más allá de una propuesta política. Busca informar, busca que quien lo vea pueda acceder a todas las miradas posibles.
Este video me recordó al documental LA 92, sobre las protestas en Los Ángeles producto de la violencia institucional y la arbitrariedad de los jurados. Ese documental también toma material de archivo —casos policiales, juicios, saqueos— para ofrecer una mirada informativa de lo que ocurrió, sin imponer una visión única ni decir “pensá como yo”.
Comentario sobre el video "Camarografo filma su propia muerte"
En un momento, el documental toma un rumbo hacia lo mórbido: una persona intenta documentar el golpe de Estado en Chile en 1973. La intención es mostrar la represión por parte del ejército leal a Pinochet, pero en ese intento nuestro punto de vista “muere” literalmente. La cámara cae. El encuadre se interrumpe. Y con él, se apaga también una parte de la historia. ¿Se puede ser más literal? La muerte del testigo no solo es el fin del registro, sino también el fin de una mirada, de una posibilidad de seguir contando lo que sucede.
En un momento, el documental toma un rumbo hacia lo mórbido: una persona intenta documentar el golpe de Estado en Chile en 1973. La intención es mostrar la represión por parte del ejército leal a Pinochet, pero en ese intento nuestro punto de vista “muere” literalmente. La cámara cae. El encuadre se interrumpe. Y con él, se apaga también una parte de la historia. ¿Se puede ser más literal? La muerte del testigo no solo es el fin del registro, sino también el fin de una mirada, de una posibilidad de seguir contando lo que sucede.
BITACORA/TP1
La idea principal es la creacion de una experiencia directa, entre dos acontecimientos, el partido en el mundial del 2022, entre Argentina y Croacia, y la busqueda y captura del asesino en serie, denominado, "La hiena humana", ambos hechos ocurridos en el mismo tiempo. Lo que propongo es mostrar esa tension, basandome en la pelicula, "Zidane" retrato de un siglo y "Deeplay."
Esto se va a realizar por medio del uso de material de archivo, audio y video, donde veremos como transcurre el partido, mientras "la hiena humana" es buscada por la policia. Sin romper el directo, y sin corte a uno y otro, se intentara simular un directo de ambos.
Newsroom remake
MIS VIDEOS
https://www.youtube.com/watch?v=sodWEDUSQ7o. 2001
https://www.youtube.com/watch?v=B35cWgD23rA FEAR CITY
https://www.youtube.com/watch?v=16fR1Ig8fXM COLD WAR SIGNALS
FUGA: TP1: https://youtu.be/949jA0G22Sc
Relacion con el cine: Mi idea principal del trabajo es encontrar de alguna manera lo lindo que es el cine. El compartir y llegar a un acuerdo de lo que nos gusta. Para mi el cine es aprender y ver mundos que de otra manera serian casi imposibles de ver. Obviamente teniendo el criterio de la ficcion. Fuera de eso. Queria presentar a manera de programa de entrevistas; una breve entrevista a alumno o profesor que se tiente y quiera compartir su experiencia. Para eso. Vamos a preguntar que fue lo que los hizo estar aca ahora. Mostrar esa escena y filmar la reaccion
Mi relación con la historia. Trabajo de autorretrato
Uno debe conocer la historia para no repetirla. Sin embargo, al estudiarla, surge la idea de que la verdadera tragedia de nuestra existencia es saber que siempre volverá a pasar. El ser humano evoluciona, sí, pero no podemos dejar de pensar que hay ciertos aspectos de nuestra conducta más primitiva que persisten y persistirán.
Mi relación con la historia se conecta con el cine, porque lo que más me atrae son las diferentes perspectivas que este ofrece para comprender con mayor profundidad un hecho. El cine documental, crudo y directo, es el que más disfruto. Un ejemplo es el documental sobre la guerra de Vietnam de Ken Burns, que aborda en gran detalle los orígenes del conflicto y a sus protagonistas. Uno cree conocer y poder predecir lo que sucederá, tiende a poner todo en blanco y negro, pero pronto descubre lo difícil que es encontrar una perspectiva única que lo guíe, llamémosla focalización, porque siempre hay muchas voces.
¿Hago mal en pensar así? Claramente existe la maldad en el mundo: Hitler fue un ejemplo, y se lo derrotó en una de las pocas guerras justas y necesarias de nuestra historia. Ahora bien, la pregunta es: ¿qué hacemos ahora?
Un lugar= La idea principal seria grabar el sonido de una cuadra en Retiro. Hora de salida de oficina y el caos de la ciudad mientras lo contrapongo con la noche. Cuando parece una ciudad fantasma
Puede que mi autorretrato suene pesimista, pero sin lo malo de la vida no existiría lo bueno. Son precisamente esas historias difíciles las que me hacen valorar dónde estoy y a la gente que me acompaña.
El mundo es complejo, la gente es difícil, y hasta yo seguramente alguna vez le caí mal a alguien. Pero, de nuevo, sin lo malo no existiría lo bueno. Los grises son la realidad, y no hay que pecar de puritano. Lo he hecho y seguramente lo volveré a hacer. Solo soy humano, y humano seré hasta el final: un animal con conciencia de su propia fatalidad, pero también de la ajena. Por eso intento ser empático.
De izquierda a derecha, cada persona tiene su historia, y eso es lo que más me interesa: la historia. Contar una buena historia o documentarla; eso también fue lo que me llevó al cine. Porque pienso que una buena historia lo vale, pero vale aún más tener alguien que la escuche. Por suerte, eso nunca termina. Es algo recíproco, casi eterno: contar y contar hasta el último aliento. Para divertirse, sí, pero también para dejar una huella; para que alguien se lleve algo de uno, una recomendación de película, un libro o una simple anécdota.
Dicen que morimos dos veces: cuando el corazón deja de latir y cuando alguien pronuncia nuestro nombre por última vez.
Esta idea también atraviesa mi manera de ver el arte. Le agradezco a mi amigo Juan por recomendarme Salem’s Lot, de Stephen King. Un autor que todos conocen, pero que en esta obra me mostró algo más: los vampiros son apenas una excusa. Como en casi todo libro de King, lo central está en los personajes. Una historia solo me atrapa si me importan sus protagonistas. Y ahí está la clave de King: el pueblo, las personas comunes que lo habitan, sus defectos, su humanidad. Recomiendo las entrevistas del director David Hoffman, en especifico a los veteranos de Vietnam y a los miembros de la contracultura de los 60s.
Me impresionó especialmente el bar del pueblo, “Dell’s”. Trabajo en un bar, y sé que son lugares donde se reúnen personalidades perdidas, gente rota que busca un amigo en la botella o en alguien que comparta su misma cueva. Dell’s podría ser la canción “Piano Man” de Billy Joel o la historia del Edmund Fitzgerald: un grupo de almas atrapadas en su rutina y en su propia vida.
Allí están Ben Mears, el escritor; Matt Burke, el profesor de inglés; y Weasel, el borracho del pueblo. En el bar, todos son iguales. Weasel es el personaje más trágico: héroe de guerra, combatió en las playas de Anzio durante la Segunda Guerra Mundial, la misma batalla donde murió el padre de Roger Waters, algo que el propio músico recordaría en The Wall y The Final Cut. Weasel, un héroe que luchó en uno de los hechos más decisivos de la historia, ahora vive de cheques del gobierno y pasa sus días entre el bar y una pensión. No aspira a otra vida; se convence de que está bien así.
Hay un momento que me parece brillante: cuando el protagonista lo ayuda, ya completamente ebrio, y al entrar a su habitación la encuentra perfectamente ordenada, como si aún quedara en él algo de aquel soldado que buscaba mantener el control de su mundo. Me conmueve eso, y admiro que King rescate a esas almas en pena, perdidas en su propia historia, para darles un lugar, una memoria. Porque, como dije antes, uno muere dos veces.
Ojalá más personas pudieran dejar de lado su ideología y sus prejuicios. No hablo de abandonar la política —a mí no me interesa la militancia ciega ni el odio repetido—, sino de poder ver al otro, al distinto, y darse el tiempo de charlar.
Muchas gracias.
Objetos que dicen yo:
Ya es dependiente mi relacion con estos audriculares. El mundo lo veo con musica de fondo.
Imagen en el espacio:
Foto desborde
Reflexión sobre el feedback.
All of our friends were here
Me parece interesante la idea de mostrar el simultaneo para evocar una fuerza colectiva, un recuerdo sobre algo, una amistad. Puede igualmente llegar a ser medio tedioso, aunque no deje de ser particular. Me gusta el uso del medio, el ruido de la maquina como algo que nos conecta todos. Un lenguaje universal.
Im sitting in a room
Lo primero que pense fue que era el hermano perdido de Hergoz. Me gusto como la voz, mas alla del contenido, esta trabajada para que uno se quede escuchando sin perder la atencion, de ahi lo familiar con Herzog, parece el inicio de un documental. Claramente esta preparado para que uno mantenga la atencion mas alla de la repetecion.
Nam June Paik
Aqui ya hay un juego con el medio espectacular. Usando el mismo cuerpo del bailairn mantiene un ritmo junto a los sonidos que no siento familiares pero siento comodos al oido. Esto hace que uno quede en un estado de extrañez pero de calma. Creo que sirve como un experimento de sentidos, donde va a estar nuestra atencion, en el narrador? o el bailarin. Luego pasa a la musica y nuevamente entramos en un trance